En clases trataba de entender ¿porque sentía ese fuerte dolor? y mientras mas me esforzaba
menos sabia. Mi idea después de tanto pensar y esfuerzos no validos era ya no pensar en ese
dolor, mientras pasaban las horas pensaba en ese granito que se había apoderado de mi cara
y trataba de ver la solución.
- Daniela ¿me repetiriá lo que acabo de decir?- me pregunto el maestro muy molesto.
- perdon maestro, es que estaba pensando en el tema del otro día- mentí para que no me reportara.
- A esta bien, supongo que no todos entendieron lo de ayer- dijo el maestro como si me creyera.
- daniela ¿que te pasa?- me pregunto Aurora mientras me susurraba.
- ¿como que me pasa?- pregunte
- pues hace rato que te estaba hablando con señas- dijo aurora muy preocupada.
- no es nada, solo pensaba- dije mientras movía mis manos.

Nunca me había sentido tan desquiseada, de echo cuando llegue a casa y mi madre al fin estuvo
para la cena, no quería comer nada. Mis padres me miraban raro y yo solo pensaba en ese tonto
dolor que tuve el otro día en el parque. Mis ojos se llenaron de lágrimas en ese momento y yo no
sabia porque, me fui corriendo inmediata mente a mi habitación y mis lágrimas habían desaparecido.

Todo era muy complicado para mi, esto no era normal pero cuando al fin compro ve que algo raro me
estaba pasando fue en la noche, no lograba dormirme y eran las 12 de la noche, en ese momento prendí la
luz en mi habitación y me fije de que mi mano derecha estaba sangrando, cuando me fui al baño
el espejo tenia algo en el escrito "pronto sera el día".
En la mañana, quería limpiar mi sangre del suelo, pero no estaba, revise mi mano derecha varias
veces y mi mano no tenia completa mente nada. Me levante de la cama y fui a ver el espejo de mi baño
que también estaba totalmente normal.

- Daniela, mira esta es una foto de tu abuela- me dijo mi madre mientras me la mostraba.
- Es igualita a mi- dije sorprendida del parecido.
- Tu abuela era especial, recuerdo que te decía una frase- dijo mi mama sin apartar los ojos de la foto.
- ¿que frase?- pregunte muy emocionada.
- pues, te decía "pronto sera el día" yo creo que se refería a cuando maduraras- dijo mi madre.
- ¿ "pronto sera el día"? debo irme- le dije a mi madre sorprendida y le di un beso para irme.

no estaba completa mente segura de lo que me estaba pasando y cuando escuche la frase recordé
lo de mi espejo, todo esto era un poco muy mortal, yo pensé que nunca me pasaría algo extraño
y fue ahí en ese justo momento cuando recordé algo.

Era cuando yo tenia 2 años y mi abuela seguía viva ella siempre me cantaba una canción con
los hechos era algo así "a las 12 de la noche con sangre de amor el espejo te dirá cada semana un
poquito mas, con un cuchillo en la mano tus deseos cumpliras". No entendía eso porque de chiquita
yo no entendía nada, pero aun que su canción ahora no tenia sentido y antes tampoco sabia que algo
Horrible me esperaba.